La niñez es un lugar abandonado que permanece como inaccesible en la memoria.
La adolescencia es un lugar de alquiler, de paso hacia otros lugares.
La juventud es ese lugar preciado que uno querría hacer eterno, pero sabe que tendrá que abandonar.
Y en ellos el hogar
el hogar es un tiempo insustituible
que se mantiene latente
como bajo pedal
de la existencia
.